El aumento de las temperaturas pone en riesgo el correcto funcionamiento del motor, y por ello hay que prestar atención a nuestros vehículos cuando hace mucha calor.
¿Quieres saber qué le puede ocurrir a tu vehículo? En esta noticia te contamos qué hacer en cada situación.
SOBRECALENTAMIENTO DEL MOTOR
Las altas temperaturas hacen que el motor trabaje en condiciones más exigentes, lo que puede llevar al deterioro de los sellos, juntas y sistemas de enfriamiento. El líquido refrigerante se convierte en un elemento clave para mantener la temperatura adecuada del motor, por lo que es vital verificar su nivel y calidad regularmente.
MENOR RENDIMIENTO Y POTENCIA
El aire caliente es menos denso y contiene menos oxígeno, lo que afecta la eficiencia de combustión. Los conductores pueden notar una aceleración más lenta y una respuesta menos enérgica del motor durante los días calurosos. Adaptar el estilo de conducción, evitando exigir al máximo el motor, puede ayudar a mitigar estos efectos.
DESGASTE DE LAS PIEZAS DE MOTOR
La dilatación excesiva de pistones, bielas y cojinetes debido al calor puede aumentar la fricción y el desgaste prematuro. Además, los fluidos lubricantes, como el aceite, pueden perder su eficacia a altas temperaturas, lo que contribuye aún más al desgaste. Mantener un programa de cambio de aceite regular y utilizar aceites adecuados para altas temperaturas puede ser fundamental para proteger el motor.
FALLOS EN EL SISTEMA DE ENFRIAMIENTO
El sistema de enfriamiento del motor, encargado de mantener una temperatura óptima, puede sufrir dificultades bajo altas temperaturas. Los radiadores pueden tener una menor capacidad de disipación térmica, y los ventiladores eléctricos pueden no ser suficientes para mantener una temperatura estable. Verificar el estado del sistema de enfriamiento, limpiar los radiadores de posibles obstrucciones y asegurarse de que los ventiladores funcionen correctamente son acciones preventivas que pueden evitar el sobrecalentamiento del motor.
SISTEMA ELÉCTRICO
Los cables y conectores pueden sufrir daños y los componentes electrónicos pueden volverse menos fiables, lo que puede resultar en fallos en los sistemas de encendido, sensores y otros componentes cruciales. Evitar la exposición prolongada al sol y mantener un entorno fresco dentro del vehículo puede ayudar a mitigar estos problemas.
Estos son algunos problemas que pueden ocasionar el calor durante estos meses, sigue estas medidas para garantizar un buen rendimiento de tu motor incluso en los días más calurosos del año.
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